Cuando la caldera se apaga y enciende repetidamente, puede causar una serie de inconvenientes, especialmente durante el invierno. Imagina estar esperando una buena ducha caliente o necesitar encender los radiadores para calentar tu casa, solo para encontrarte con una caldera que no deja de apagarse y encenderse. Este problema no solo afecta tu confort, sino que también puede aumentar tus facturas de energía y causar desgaste prematuro en el sistema.
En este artículo, exploraremos las posibles razones por las cuales tu caldera se apaga y enciende constantemente, y te ofreceremos soluciones prácticas para resolver este problema y asegurar un funcionamiento eficiente y fiable de tu sistema de calefacción.
¿Por qué se apaga la caldera?
Que la caldera se encienda y se apague es una de las averías más comunes de las calderas. Para solucionar el problema, comprueba primero que la caldera está encendida y que está correctamente conectada a la red eléctrica.
Otra razón por la que la caldera se apaga y se vuelve a encender podría ser porque activa el sistema de seguridad. Algunos modelos de calderas de gas están diseñados para apagarse automáticamente cuando han agotado su función. En este caso, cuando el agua alcanza la temperatura deseada, la caldera se apaga. Pero si, por el contrario, la caldera se apaga casi instantáneamente al encenderla, probablemente se trate de una avería. El sistema se apaga entonces para reducir el peligro y los daños al aparato.
¿Qué pasa si se apaga la llama de la caldera?
Si la llama de la caldera se apaga, puede ser un síntoma de varios problemas que necesitan atención inmediata para evitar mayores complicaciones. Aquí te explicamos algunas posibles causas y qué puedes hacer al respecto:
- Falta de combustible. La causa más común es la falta de combustible. Si utilizas una caldera de gas natural, podría deberse a que el suministro de gas se ha interrumpido por alguna razón, como una avería en la línea de gas o un problema con la compañía de suministro. En este caso, revisa si otros aparatos de gas también están funcionando y verifica el medidor de gas para asegurarte de que no haya una interrupción en el suministro.
- Problemas con la válvula de gas. La válvula de gas podría estar cerrada, lo que impide que el gas llegue al quemador. Asegúrate de que la válvula de gas esté abierta y funcione correctamente.
- Problemas de encendido o electrodo de encendido. Si la llama de la caldera se apaga inmediatamente después de encenderla, podría ser un problema con el sistema de encendido o con el electrodo de encendido que puede simplemente estar sucio. Esto podría requerir una revisión y posiblemente el reemplazo de estas piezas por parte de un técnico cualificado.
- Termostato defectuoso. Un termostato defectuoso podría causar problemas con el encendido de la caldera, ya que no envía la señal correcta para mantener la llama encendida.
- Problemas de ventilación. La falta de ventilación adecuada puede causar que la caldera se apague. Asegúrate de que las rejillas de ventilación no estén bloqueadas y de que haya suficiente flujo de aire alrededor de la caldera.
- Problemas de presión del agua: Si la presión del agua en la caldera es demasiado baja, podría apagar la llama. Verifica la presión del agua y ajústala según las recomendaciones del fabricante de la caldera.
¿Qué hacer si la llama de la caldera se apaga?
- Revisa el suministro de gas. Asegúrate de que no haya interrupciones en el suministro de gas y de que la válvula de gas esté abierta.
- Verifica el termostato. Asegúrate de que el termostato esté configurado correctamente y funcionando correctamente.
- Revisa la presión del agua. Verifica la presión del agua y ajústala según las recomendaciones del fabricante.
- Llama a un técnico. Si no puedes identificar la causa o no puedes solucionar el problema tú mismo, llama a un técnico especializado para que inspeccione y repare la caldera de manera adecuada.
Es crucial abordar cualquier problema con la caldera de inmediato para garantizar el funcionamiento seguro y eficiente del sistema de calefacción en tu hogar.
¿Por qué se me enciende la caldera sola?
Una caldera que se enciende sola cuando no es necesaria puede ser el resultado de al menos tres situaciones: problemas con el termostato, un mal funcionamiento de la placa base y una anomalía en la gestión de la función anticongelante.
El termostato es, en cierto modo, el mando a distancia de tu caldera: si el mando a distancia deja de funcionar correctamente, parecerá que es la caldera la que ya no sigue nuestras instrucciones. Si por ejemplo el termostato deja de registrar correctamente la temperatura ambiente, podría enviar lecturas erróneas a la caldera, provocando su encendido anómalo.
También una programación imprecisa del termostato podría provocar el encendido de la caldera a horas distintas de las deseadas. Para resolver estas situaciones, basta con comprobar los ajustes realizados.
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Si el problema no está en el termostato, podría haber un fallo en la gestión de la función anticongelante de la caldera. Cuando la temperatura ambiente exterior desciende por debajo de un determinado umbral crítico, la función anticongelante permite encender la caldera, iniciando la combustión para calentar el agua del circuito hidráulico y evitar que se congele, dañando las tuberías y provocando su rotura. Si la sonda que detecta la temperatura exterior no funciona, la caldera puede poner en marcha la función anticongelante cuando no es necesario.
El tercer problema al que puede enfrentarse tu caldera es un mal funcionamiento de la placa base, debido a una sobrecarga de tensión o simplemente a suciedad acumulada en los circuitos de la placa. Para evitar la mayoría de los problemas de su caldera, es conveniente que el mantenimiento de la misma sea realizado periódicamente por personal especializado.
El uso de un módulo de caldera inteligente puede ayudarte a resolver estos problemas. Gracias a la aplicación integrada, puedes controlar y gestionar el encendido, el apagado, la presión y los posibles fallos de tu caldera estés donde estés.
